jueves, 7 de junio de 2012

El Caballo Peruano al Inicio del Virreinato


por: Andrés Sanchez Alayo

La relativa estabilización del Virreinato, a partir de 1554, permitió el florecimiento de las ciudades y la normalización de las rutas terrestres para viajeros y comerciantes. El caballo y la mula fueron entonces los medios de transporte que ayudaron a la forja del Perú hispano-indígena, raíz y cimiento de la futura nación independiente. No lo fueron ni los carruajes ni las carretas, por la difícil geografía de los arenales costeños y las abruptas pendientes de la sierra. En efecto, a lomo de estas bestias se trasladaron las autoridades de la monarquía para ejercer sus funciones de gobierno, los sacerdotes se aplicaron a la evangelización y la extirpación de idolatrías, los comerciantes y mineros al cuidado de sus empresas y los terratenientes al control de sus dominios agrarios. 

La riqueza concentrada en las principales urbes coloniales, y en particular en Lima, hizo que en ellas se mantuvieran las mejores cuadras de caballos, cuya fama recogen los historiadores Garcilaso Inca de la Vega y el jesuita Joseph de Acosta, así como el carmelita Antonio Vásquez de Espinoza, el cual pondera como los mejores caballos del Virreinato del Perú, los criados en Luya de Chachapoyas. Estos especímenes cumplieron además una función de entretenimiento y ejercicio de la nobleza española y criolla en las grandes fiestas religiosas, en las celebraciones por la coronación de los reyes, en los cortejos fúnebres por el fallecimiento de aquellos o de los príncipes de la Casa Real, en los juegos de cañas, sortijas y alcancías, así como en las corridas de toros que inauguró  Francisco Pizarro al alancear reses bravas en la Plaza Mayor de Lima. 

Andrés Sanchez Alayo
Tomado de:  El Caballo de Paso Peruano. Pro Educación. 1,999

jueves, 24 de mayo de 2012

La Originalidad del Caballo de Paso Peruano


por: Andrés Sanchez Alayo


El noble caballo peruano es de contextura más fina que la raza andaluza de la cual desciende. Es de tamaño mediano, rara vez mide más de 14 puños de alto, algo corto, con un torax fuerte, pecho ancho. piernas finas, menudillo delgado, un cuello corto y fuerte, cabeza relativamente grande, orejas pequeñas en punta y mirada fogosa
Juan Jacobo von Tschudi, 1842. 


De acuerdo con el testimonio de este viajero suizo, del propio Antonio Raimondi, y de muchos otros, el caballo peruano de paso fue desarrollándose a lo largo de los siglos XVII y XVIII, pero recién en el XIX habría fijado definitivamente las características que lo han convertido en un ejemplar único de su tipo a nivel mundial. Se le considera único porque el propio caballo andaluz, del cual desciende, perdió sus características originales y adquirió otras, debido a sucesivos cruces en la Península. Las diferencias se iniciaron en la época de Carlos V, cuando se cruzaron caballos españoles con alemanes y daneses, provocando cambios profundos en las características de los caballos hispánicos hasta fines del siglo XVIII. 
El caballo de paso americano y el del Perú tienen profundas diferencias con el caballo andaluz, de tal forma que el de nuestro continente, gracias a su ascendencia y al adiestramiento recibido a lo largo de medio milenio, ha adquirido características únicas y hermosas que lo han convertido en el más bello de los equinos. 

Andrés Sanchez Alayo

lunes, 14 de mayo de 2012

El Caballo de Paso y el Paisaje Peruano


por: Andrés Sanchez Alayo
El ilustrado historiador jesuita Joseph de Acosta, destaca que en el Perú “no sólo se habían multiplicado extraordinariamente los caballos, sino que eran tan buenos como los de España”. Igual opinión sustentaba el Inca Garcilaso, a quien le extrañaba “que no se llevaran del Perú a España en los barcos que traían mercadería a América y regresaban allá vacíos”
Los caballos que se difundieron por el continente se adaptaron a muy diferentes climas y condiciones geográficas. Es admirable la manera en que os caballos peruanos de paso han vencido los retos geográficos que han debido encarar, como el de los arenales de la costa, el escabroso terreno de los valles y quebradas interandinos e, inclusive, las alturas que lindan con las frígidas regiones de la puna. 
El desarrollo en condiciones tan difíciles, llevó al gran conocedor peruano don Carlos Luna de la Fuente a determinar la existencia de tres tipos de caballos de paso y dos subtipos: el costeño, el costeño adaptado a la altura, y el andino. De este último se derivan dos subtipos: el morochuco y el chumbivilcano. 
Hay quienes aseveran que fue en los arenales de la costa norte en donde se forjó el especial modo de andas del caballo peruano de paso, ya que la carencia de forraje y las enormes distancias desérticas -en particular en los arenales de Sechura y Olmos- hicieron que los jinetes viajeros exigieran constancia y suavidad de el andar sobre suelo blando y bajo un sol abrasador. 
A ello hay que agregar que el relativo aislamiento del Perú durante el virreinato y la primera época de la república, por su posición geográfica en la costa occidental de América del Sur, facilitó la forja de un ejemplar especial, expuesto a escasos cruces, al que se podía formar sin los cambios e intervenciones del Estado. Estas sí influyeron, en cambio , en las transformaciones genéticas de los caballos andaluces, ya que los cruces se rigieron por disposiciones reales durante más de cuatro siglos. 
El resultado fue un excelente regalo de la naturaleza, una raza de excepcional belleza y garbo: El Caballo de Paso Peruano. 

Andrés Sanchez Alayo

lunes, 30 de abril de 2012

LA LLEGADA DE LOS PRIMEROS CABALLOS AL PERU


La hueste de ciento setenta hombres de Francisco Pizarro, que capturó al inca Atahualpa en noviembre de 1532, trajo consigo a sesenta y dos caballos que fueron los originarios fundadores de la especie en el Perú. Se supone que éstos provenían de los criaderos de Nicaragua, a donde llegaron gran cantidad de caballos en el segundo viaje de Colón en 1493. 
A estos sesenta y dos caballos de Pizarro, se sumaron las ochenta y cuatro bestias que trajo Diego de Almagro luego de la prisión del Inca y los de Hernando de Soto, quien vino de Nicaragua y de quien Garcilaso de la Vega diría que era un gran jinete. Hay que recordarlo en el aquel episodio según el cual De Soto, enviado por Pizarro a entrevistarse con el Inca Atahualpa en las afueras de Cajamarca, hizo alarde de su excepcionales habilidades como jinete: para exhibir ante la corte del Inca su dominio de la cabalgadura, emprendió un rápido galope que terminó frenando en seco, a breve espacio de los guerreros incas. Se dice que Atahualpa ordenó ejecutar a aquellos que retrocedieron ante la embestida. Este hecho evidencia la agilidad y nervio del corcel, el dominio del jinete y el pavor que el extraño animal inspiró a los aborígenes. 
Por último, en 1534 llegó a Quito, Pedro de Alvarado, gobernador de Guatemala, al mando de quinientos hombres con doscientos cincuenta caballos. 
Todo ello hizo que en tres años llegaran al Perú varios centenares de caballos que fueron decisivos para el dominio definitivo del Tahuantisuyo por parte de los españoles. Estos animales enfrentaron la resistencia indígena -el cerco del Cusco que impuso Manco Inca entre 1536 y 1537-, y fueron los progenitores de los primeros caballos nacidos en tierras peruanas. 

lunes, 23 de abril de 2012

Los Orígenes del Caballo de Paso Peruano

Descendiente directo del ancestral caballo español, traído a América primero por Cristobal Colón y luego por los conquistadores, el caballo peruano ha pasado por diferentes etapas hasta consolidar sus características actuales. Tiene entre sus orígenes más remotos al caballo africano berberisco, criado hacia el siglo VI d.C. por tribus mahometanas de la Berbería o costa sur del Mediterráneo.


Uno de los mayores legados de la cultura islámica a la españa cristiana fue el caballo berebere. Sobre este ágil y caleroso animal los ejércitos de Tarik, a las órdenes de Musa Ibn Musayr, cruzaron el estrecho de Gibraltar en el 711 d.C., derrotaron al rey Rodrigo y se extendieron por gran parte de la península ibérica de donde serían finalmente expulsados ocho siglos después.

El pueblo íbero había ingresado desde el África a la Península, alrededor del siglo XII a.C. trayendo el Equus Cavallus Africanus. Éste se cruzó con los ejemplares traídos por los celtas, que habían incursionado por el norte del Península. De los caballos traídos por ambos pueblos surgió el caldón, que habitó en el norte de Andalucía y convirtió a esta región en el mayor centro de producción de la nueva especie. Ésta alcanzaría, posteriormente, una fama extraordinaria en Europa pro sus excepcionales características.


El hecho de que Andalucía hubiera sido la sede principal de la dominación mora, con los espléndidos califatos de Córdoba y Sevilla en su época cimera y con los reinos de taifas después, y de que Granada fuese su último bastión hasta la victoria de Isabel y Fernando en enero de 1492, hizo de esa región el centro de la crianza y multiplicación del caballo español de origen berebere, que es el que pasó al Nuevo Mundo. Estrechamente vinculado con este acontecimiento será el hecho de que las expediciones descubridoras de Cristóbal Colón salieron de Andalucía; por lo tanto un número notable de conquistadores y colonizadores fueron oriundos de esta zona.


Andrés Sanchez Alayo.
Tomado de: Luis Enrique Tord, en "El Caballo Peruano de Paso". 2008



martes, 3 de abril de 2012

SOBRE EL ARTE DE MONTAR EL CABALLO DE PASO FINO

A continuación presentaré un artículo publicado por Michele Londoño, en el cuál nos explica y nos enseña el arte de montar un caballo de paso fino. Los dejo con el artículo.


Poquita gente se da cuenta de este fenómeno, hasta los jinetes de otras razas desconocen esta verdad. En la raza del caballo de paso fino (originario de Colombia), el jinete puede participar en un 40% hasta un 70% de la calidad de los andares de su caballo. Claro que el potrico de paso fino nace con sus andares naturales de quatro tiempos. Tambien el sistema de doma y el buen manejo del joven caballo de paso fino contribuyen mucho en mejorar los andares para la pista o el paseo, con el freno o sin el freno. Pero fíjense que el mismo caballo montado por su entrenador y montado seguido por su dueño luce diferente, y si aparece un verdadero novicio para montarlo, puede hasta trotar o trocharse este mismo caballo. ¿Por qué? Solamente porque le falta al montador las claves esenciales de comunicacion con el caballo de paso fino para llevar a su fin la combinacion perfecta entre el porte de cabeza, el angulo del cuello y los movimientos correctos del andar en el ritmo de cuatro tiempos.

Todo se encuentra en la mano del jinete y en su posicion relajada en la silla. Si el nuevo jinete deja caer las riendas demasiado en el cuello, o halla demasiado la rienda por falta de equilibrio, el caballo pierde su ritmo y su cadencia, ...¡si no pierde tambien la paciencia! Tambien, por falta de herrar el caballo de paso fino con los angulos correctos, el nuevo dueño puede causar desequilibrio en los andares. El proceso de monta se puede comparar a otro en el mundo de las bellas artes. Montar un caballo de paso fino se parece en algo a cumplir los pasitos perfectos de ballet en un teatro para una bailerina profesional. Nadie podra acusarla de fallar si la hacemos bailar en un via piedrosa, cuando elle se desliza divinamente bien en un suelo lizo y brillante.

Todos los elementos del manejo y de la monta del caballo de paso fino tienen que llegar a un punto exacto, para que el caballo se mantenga en su ritmo suave y elegante a cada momento. Para llegar a este resultado tan exitoso, unas lecciones de montar a caballo se requieren, por lo menos al comienzo de la monta de un nuevo caballo de paso fino, hasta que la comunicacion se establezca claramente entre el jinete y su caballo. Pero no se debe uno desanimar tampoco del deporte de la monta del paso fino, delante tanta responsabilidad del jinete en el ritmo, esto no representa en ninguna forma un obstaculo al placer que se siente montando, ademas el jinete sin lecciones previas puede disfrutar completamente de su caballo a su modo. La belleza de la raza hace que su caballo de paso fino se presta para todas las disciplinas equinas, desde la monta tipo Ingles, tipo Western, hasta el salto y los eventos multiples de endurancia. La clave esta en el equipo que llegan a formar el jinete y su montura, y en las señales claras que entiende su caballo. Es facil para un caballo de paso fino ganar unos eventos de tres dias o de larga distancia, contra todas las otras razas, se ha visto con creces en America y Sur America, con todo tipo de jinetes nuevos, que no son entrenadores.

Al caballo de paso fino le gusta complacer a su montador, y responde sin hesitacion y como mejor pueda a las estimulaciones del que monta, que sea un niño, que sea una persona mayor, sin ningun problema. Se han desarrollado personas con problemas fisicos o mentales en muchos programas de terapia equina incluyendo a los caballos de paso fino. Aquellos caballos se acostumbran facilmente al manejo diferente de la rienda, a ser montados a pelo, con ayudas de la pierna, de la voz, o sin ayuda ninguna. La agilidad mental y la belleza del caracter del caballo de paso fino nos parece un regalo que hay que cuidar, asi es apenas justo que uno aprenda a montar mejor para disfrutar al maximo de la suavidad de sus andares. Este articulo no pretende dar tecnicas especificas para enseñar a montar al caballo de paso fino. Se recomiende tomar lecciones bajo el ojo de un instructor profesional, que sea en una clinica o una escuela establecida de monta del caballo de paso fino. A veces, los caballos de paso fino se encuentran en lugares tan lejanos, tan fuera de todo sitio conocedor de la raza, que no se puede encontrar ningun entrenador, ningun instructor que sepa bastante de los andares o de la monta del caballo de paso fino, porque ese mismo queda escaso en el mundo, como una raza todavia misteriosa y privilegiada. Asi que solamente daremos aqui unos puntos de referencia para los novicios, para los jinetes que vienen de otras costumbres ecuestres con muchas ayudas de pierna, que sea para dressage o para la disciplina Western. La pregunta que mas se oye es la del galope, asi que, si, claro que un jinete puede galopar con su caballo de paso fino, pero a lo mejor le cambiara a lo largo la suavidad de sus andares en las modalidades del corto y largo, asi que se debe galopar solo de vez en cuando, por precaucion. ¡Tan facilmente como puede extenderse el paso en el galope, tan facilmente se puede colectar para la pista! A los jinetes de dressage les puede parecer mas facil la monta del caballo de paso fino, solamente por la semejante manera de sentarse en ''el asiento'' y por la necesitad de colectar al caballo en perfecto grado con unas manos muy suaves. Lo unico que no debe hacer el junete de dressage es apretar mucho la pierna, no hay necesitad con el caballo de paso fino que tiene de por si un motor que siempre va adelante, sin espuela. Demasiado pierna, demasiado espuela puede transformar al caballo de paso fino en une bomba de tiempo, cuando aquel no necesita sino el sosten de la rienda y el freno para disminuir velocidad o parar del todo, y al parar, hay que recordar de soltar la rienda enseguida. Si se queda el jinete con la rienda apretada cuando el caballo ha parado, aquel ira en marcha atras, como se le ha enseñado de potro. Cuando el jinete siente por primera vez el poder del motor del paso fino bajo su asiento, esto mismo causa una emocion comparable a la de un corredor de carro de carrera, sentado en un porsche. Lo que se siente es lo que se llama el brio, el espiritu del paso fino. Puede asustar a los principiantes, pero es una gran calidad en el caballo de paso fino, no un defecto. Sin el brio, no hay motor de propulsion. No se debe enpanicar uno. No se debe preocupar. La monta de un caballo con brio se vuelve una pasion. Las manos del jinete son el freno, ¡por favor frenen con gentileza! Las piernas son el accelerador, ¡no abusen! Una vez que el jinete se acostumbra al brio y reconoce que los andares dependen de este brio, y cuando va relajandose uno con el ritmo, despues de ensayar unas cuantas paradas, la comunicacion equina empieza. Todo va bien si el caballo, claro, tiene alguna base de buen entrenamiento. Ud aprende con la practica, mas puede montar, mejor monta. Apenas se le da un besito, va corriendo el caballo, y si se siente algo suave en la silla, lo esta haciendo bien el jinete, si se siente sacudido o maltratado en la silla, lo esta haciendo mal, por causa de cualquier tropiezo en los andares. No es sino parar cuando pasa esto, reajustar su posicion, tratar otra vez las diferentes velocidades, pedirle ayuda a alguien en el suelo, si se requiere mas confianza, y aprender a conocer bien a su caballo.

Empiezen a conocer al caballo en el piso, a montarlo caminando, despacio, en un sitio encerrado y comodo, despues ensayen las calles y los paseos. La pista es el ultimo gol.

Para los jinetes nuevos del caballo de paso fino queriendo ir lejos, hay cinco palabras para memorizar:

1. Paciencia
2. Relajamiento
3. Confianza (en si mismo como en el caballo)
4. Equilibrio y practica
5. Precaucion

Andrés Sánchez Alayo

miércoles, 28 de marzo de 2012

Equinoterapia y Sindrome de Down

A continuación presentaré un artículo muy interesante sobre una terapia conocida como la zooterapia, específicamente la equinoterapia.
La equinoterapia, nos es útil como apoyo terapéutico en el síndrome de Down. Lo primero que debemos tener en cuenta son las contra-indicaciones de este tipo de terapia. Una población considerable de personas con síndrome de down, sufren de inestabilidad atlanto axial. Esta consiste en que la apófisis odontoides también llamada diente o el ligamento transverso de la vértebra axis están debilitados. Esto no es más que el hueso que tiene la segunda vértebra cervical que sirve como pívot para realizar los movimientos de la cabeza, no soporta el estrés mecánico que puede producir el andar del caballo sobre esta vértebra, trayendo como consecuencia un paro cardio-respiratorio, por presionar en algún momento el bulbo, que es la parte del cerebro que controla la respiración y los latidos del corazón. Esta inestabilidad la podemos diagnosticar en una radiografía de rayos X cervical (atlanto axial), es importante anotar que este examen debe ser requisito fundamental junto con la remisión médica para realizar la equinoterapia. La equinoterapia ofrece muchas técnicas de trabajo como lo son la hipoterapia pasiva, en la cual el jinete es totalmente pasivo y es acompañado por el terapeuta en una monta que llamamos back riding o monta gemela; la hipoterapia activa en la cual el jinete puede ir solo o en monta gemela y participa activamente en el trabajo; La monta terapéutica, en la cual se incorporan varios jinetes en un trabajo de sección (fila india) y es un trabajo que mezcla lo terapéutico con lo deportivo; Por último, la equitación como deporte. Teniendo en cuenta estos elementos podemos diseñar un plan de trabajo específico para el síndrome de Down. 
La hipoterapia activa es un primer paso. En esta etapa debemos lograr un acercamiento con el caballo, en el cual el jinete lo vea como su compañero, sin temores y con mucho respeto, evitando que lo golpee o maltrate y aprenda a cuidarlo, también buscamos un tono muscular adecuado, aumentar el equilibrio, una postura correcta, un buen asiento que es la manera correcta de sentarse en el caballo, buena conducción, un seguimiento de ordenes, disciplina y concentración. También en este momento podemos realizar trabajos de fonoaudiologia y psicológicos, gracias a la receptividad con la que contamos al momento de la terapia. La actividad debe ser en alto, paso o trote y no debe pasar de 30 o 40 minutos. El siguiente nivel a trabajar es la monta terapéutica, en la cual incluiremos al jinete en un trabajo con mas personas, con o sin discapacidad, en este trabajamos secciones o grupos máximo de 6 personas en fila india o individual, donde haremos énfasis en ejercicios de equitación y adiestramiento, base fundamental de toda actividad ecuestre y de la equinoterapia como tal. En la monta terapéutica buscamos encontrar un acondicionamiento físico adecuado (pues la mayoría de personas con síndrome de Down son muy sedentarias), disciplina deportiva, tono muscular, integración social, vencer temores y enseñarles a ellos un oficio, como el de las actividades ecuestres, con el que puedan integrarse a una vida productiva.También dentro de las zooterapias podemos hablar del uso de perros o aves, en este caso le daremos al paciente una responsabilidad de cuidado y entrenamiento de su animal, buscando hacerlo sentir útil y con una labor a realizar.  El perro nos puede servir de apoyo al trabajo con el caballo, como un complemento en la rutina de entrenamiento. En general, los padres de niños y adultos con síndrome de Down ven en la zooterapia, y en concreto la equinoterapia, un recurso eficaz y con múltiples beneficios visibles;  por su parte, el paciente encuentra en esta práctica, más que un tratamiento, un medio afectivo de expresión, de lúdica y de desarrollo personal.



Andrés Sánchez Alayo

martes, 13 de marzo de 2012

Frases famosas sobre caballos



A continuación presentamos algunas frases escritas sobre este fabuloso animal que es el caballo. Espero les gusten.



  • Si se logra que el caballo tome el paso que él adoptaría a su voluntad cuando despliega su belleza, aparecerá alegre y magnífico, orgulloso y feliz de haber sido montado” JENOFONTE
  • “La flexibilidad y ausencia de coacción son las condiciones prévias a toda obediéncia voluntariamente ofrecida, que no sea un martírio o una esclavitud para el caballo” FRANÇOIS ROBICHON DE LA GUERNIÈRE
  • “Doma pronto y usa tarde” Proverbio árabe
  • “Jamás hay que utilizar la violencia para que un caballo perfeccione sus capacidades; sino alternar con delicadeza exigéncias y recompensas; multiplicar los cumplimientos y reducir los castigos” Coronel ALOIS PODHJASKY
  • “El caballo no ha de ser un esclavo que lleva a su amo, sino un bailarín que evoluciona y se desliza con él” HANS- HEINRICH ISENBART
  • “El jinete sólo puede estar satisfecho cuando el caballo ama su trabajo” HANS- HEINRICH ISENBART
  • “Aprende a conocer los pensamientos del noble animal que deseas montar. No seas excesivo en tus exigencias. No le exijas proezas inútiles” GOETHE
  • “Tendremos cuidado de no inspirar disgusto al joven animal, lo cual haria perder su gracia afable. Ella es parecida al perfume de las flores que no vuelve cuando se ha desvanecido” ANTOINE PLUVINEL (1.600)
  • “No te des la gracias jamás. Agradece siempre a los caballos por la dicha y alegría que sientes gracias a ellos” Anónimo
  • “Y mientras cabalgaba, mi corazón resonaba en los pasos sobre el prado húmedo; resonaba en el resoplar y el tascar del freno de mi caballo tordo, y una dicha inefable iluminó mi corazón, y supe que si dejaba ahora este mundo, caería en el paraíso” BARON DE MÜNCHAUSEN
  • “Un caballo triunfa cuando se le ha enseñado el camino para ello” MÜSSELER
  • “Los viejos métodos de equitación se han resumido en uno único y universal, podría decirse; simple, lógico y racional, que descansa en bases puramente psicológicas” JUAN M.ROMERO BLANCH
  • “La reflexión y la lógica permiten al jinete, en todo momento, trazarse su própio camino” JUAN M.ROMERO BLANCH
  • “Necesitas la posición del silencio. Si tu cuerpo no está en armonía con el del caballo, no puedes escuchar lo que él te está diciendo” JANE BARTLE WILSON
  • “El lomo del caballo es el puente que sirve para franquear el obstáculo. Hay que dejarle que lo redondee libremente. Para que coordine la elevación y la caída” CAPITÁN CAPRILLI
  • “Lo que importa es que os habitueis a amoldaros al movimiento del caballo, a sentir su trayectória, a vivir su salto” CHEVALIER D’ORGEIX
  • “No hay nada más motivador que iniciar un caballo jóven; irlo subiendo para ver lo que es capaz de llegar a hacer. Si quieres crear algo, como un artista, coge un caballo jóven y haz tu própia obra. Después de todo, si no sabes pintar, siempre puedes comprar un cuadro hecho” GEORGE THEODORESCU
  • “Los caballos nunca dicen ‘no’. Ellos dicen ‘esto es demasiado’. Si pides mucho, y el caballo no está preparado para hacerlo, lo mejor es pensar con lógica y encontrar el porqué no puede hacer lo que le pides” GEORGE THEODORESCU”La doma no excluye la libertad. La crea. Un hombre a caballo, un lazo doble, dos corazones, un sólo pensamiento. El animal, dueño de sus facultades, ágil, fiero, libre, unido al ser humano y formando con él una única entidad, debe seguir siendo libre, fiero y ágil, siempre dueño de sus facultades. Esta larga y paciente educación recíproca, en que pronto es imposible distinguir el alumno del profesor, alcanza su punto culminante en la obra de arte que representa un caballero cabal. Las etapas de este proceso son el desarrollo de su fuerza física que permite al caballo soportar una carga, aprecio mutuo que lleva a la obediencia e intercambio sutil de comunicaciones invisibles. La armonía concertada de los movimientos, alcanzada gracias a la ambición, al trabajo, y no sin pena, es el objetivo. La equitación roza las fronteras del arte, creando una obra maestra constantemente renovada, puesto que sólo dura un instante. La Naturaleza fija las leyes de este arte, porque la potencia y la libertad de movimiento son dadas al caballo por la Naturaleza, pero debe recobrarlas a pesar del peso del caballero. El caballo no ha de ser un esclavo que lleva a su amo, sino un bailarín que evoluciona y se desliza con él. Doma es una palabra de resonancia dura, un término mal empleado. La Doma es la vuelta a la libertad.” HANS- HEINRICH ISENBART
  • “Es como sacar una chica a bailar. Si no tienes confianza en ti mismo y te da miedo que ella te diga que no, y te quedas mirándote las botas con timidez, como hay Dios que te dirá que no. Bueno, sí, siempre puedes agarrarla y obligarla a dar vueltas, pero seguro que a ninguno de los dos le gustará mucho ese baile. No hay ninguna diferencia entre bailar y montar a caballo. El truco está en tener confianza y consentir. El hombre lleva pero no arrastra a su pareja; ella siente el tacto que él le ofrece y lo sigue. Entre los dos hay armonía, cada cual sigue el ritmo del otro, dejándose llevar por el tacto. Nada más.” NICOLAS EVANS “The horse whisperer” 1995


Andrés sánchez Alayo

Fuente: http://www.antrec.com/blog/general/frases-famosas-sobre-caballos

Reflexiones sobre la crianza del caballo Peruano de Paso

Debido al aislamiento sufrido durante más de 400 años, el caballo Peruano de Paso ha evolucionado como una de las razas mas puras del mundo y como una entidad única en el reino del caballo. La existencia de esta raza ha sido denominada el más grande triunfo de la selección genética jamás lograda por un grupo de criadores.

El caballo peruano actual desciende de los caballos introducidos en el Perú por los españoles en el curso del siglo dieciséis. Está bien documentado que los Conquistadores españoles han traído al nuevo mundo caballos andadores y trotadores de la misma raza, y como está consignado en los Archivos del Indio, el Caballo Español era una raza mestiza del Gallego (Galiceño, caballo del norte de origen Celta), del Soria, y del Barba de Marruecos. El caballo peruano es un caballo de sangre caliente, un caballo español de pura raza que fue criado selectivamente por el andar luego de haber ganado las riberas de Perú. Ninguna sangre exterior fue introducida a la raza peruana. La crianza selectiva asociada a otros factores como el clima y las pasturas, han servido a modificar las generaciones sucesivas y a crear una nueva raza que posee características diferentes de cualquier otro caballo del mundo.



Llano de paso

La característica heredada y complemento natural de la raza es una marcha lateral especial a cuatro pasos llamada llano de paso. El llano de paso es una marcha rota. Consiste en un aire permanente, armonioso y rítmico en el que el animal tiene un movimiento alternativo lento y agradable. Es un aire rápido en el que el centro de gravedad del caballo permanece casi inmóvil, produciendo una equitación confortable, sin sacudidas.

Gracias a esta marcha lateral a cuatro pasos único e innato, el caballo Peruano de Paso es indudablemente el caballo de equitación más confortable del mundo.

El llano de paso es ejecutado con un movimiento distinto de las patas de adelante, llamado término. Es un movimiento gracioso, suelto en el que las anteriores se extienden hacia el exterior cuando el caballo avanza, esto se asemeja mucho al movimiento del brazo de un nadador.

Termino es una espectacular y hermosa acción natural. No es como el movimiento del ala que proviene del hombro que da al caballo la capacidad de balancear hacia delante su pata delantera con una fuerza vertical mínima. En la marcha lateral, la acción de la pata es transmitida en un 100% por la propulsión.

Un principio importante para los criadores peruanos es que los grandes caballos peruanos nacen con la marcha lateral- ellos no se lo enseñan.

El entrenamiento solo contribuye a subrayar la aptitud inherente al animal, nunca a provocársela artificialmente.



Su crianza

Para asegurar la conservación del aire y de la marcha natural, ningún caballo es admitido en la presentación herrado o con cascos de mas de 10 cm. En el fondo, todos los criadores de caballos peruanos utilizan las mismas técnicas de entrenamiento y el mismo equipo, de nada sirve utilizar aparatos o otras ayudas artificiales.

Los caballos Peruano de Paso presentan todos los colores de pelaje a base uniforme, como también blanco y ruano. Su talla media va de 1.42m a 1,54m, y en general, su peso varía entre 400 y 500 kilogramos, como los Morgans y los Árabes.



El caballo Peruano de Paso actual es el resultado de mas de 400 años de crianza selectiva. La raza combina cualidades que podrían ser contradictorias. Es muy fogoso- pero fácil de manejar, libre y distendido en sus movimientos. Sus patas anteriores tienen un aire brillante- pero su marcha es extremadamente confortable y su pie es seguro. Es un caballo esbelto, pero es muy poderoso. Todo esto puede ser acompañado por gracia e inteligencia, el amor y la devoción de numerosos criadores, muchos de ellos anónimos. Su arduo y silencioso trabajo ha hecho del caballo Peruano de Paso uno de los más grandes tesoros del país, y el orgullo unificador de todo un pueblo.


Andrés Sánchez Alayo

jueves, 1 de marzo de 2012

El arte de montar el Caballo de Paso fino

En esta oportunidad les presento un artículo escrito por Michele Londoño, en donde nos cuenta y nos explica la manera correcta de montar a un caballo de paso fino.

Poquita gente se da cuenta de este fenomeno, hasta los jinetes de otras razas desconocen esta verdad. En la raza del caballo de paso fino, el jinete puede participar en un 40% hasta un 70% de la calidad de los andares de su caballo. Claro que el potrico de paso fino nace con sus andares naturales de quatro tiempos. Tambien el sistema de doma y el buen manejo del joven caballo de paso fino contribuyen mucho en mejorar los andares para la pista o el paseo, con el freno o sin el freno. Pero fijense que el mismo caballo montado por su entrenador y montado seguido por su dueño luce diferente, y si aparece un verdadero novicio para montarlo, puede hasta trotar o trocharse este mismo caballo. ¿Por que? Solamente porque le falta al montador las claves esenciales de comunicacion con el caballo de paso fino para llevar a su fin la combinacion perfecta entre el porte de cabeza, el angulo del cuello y los movimientos correctos del andar en el ritmo de cuatro tiempos.

Todo se encuentra en la mano del jinete y en su posicion relajada en la silla. Si el nuevo jinete deja caer las riendas demasiado en el cuello, o halla demasiado la rienda por falta de equilibrio, el caballo pierde su ritmo y su cadencia, ...¡si no pierde tambien la paciencia! Tambien, por falta de herrar el caballo de paso fino con los angulos correctos, el nuevo dueño puede causar desequilibrio en los andares. El proceso de monta se puede comparar a otro en el mundo de las bellas artes. Montar un caballo de paso fino se parece en algo a cumplir los pasitos perfectos de ballet en un teatro para una bailerina profesional. Nadie podra acusarla de fallar si la hacemos bailar en un via piedrosa, cuando elle se desliza divinamente bien en un suelo lizo y brillante.

Todos los elementos del manejo y de la monta del caballo de paso fino tienen que llegar a un punto exacto, para que el caballo se mantenga en su ritmo suave y elegante a cada momento. Para llegar a este resultado tan exitoso, unas lecciones de montar a caballo se requieren, por lo menos al comienzo de la monta de un nuevo caballo de paso fino, hasta que la comunicacion se establezca claramente entre el jinete y su caballo. Pero no se debe uno desanimar tampoco del deporte de la monta del paso fino, delante tanta responsabilidad del jinete en el ritmo, esto no representa en ninguna forma un obstaculo al placer que se siente montando, ademas el jinete sin lecciones previas puede disfrutar completamente de su caballo a su modo. La belleza de la raza hace que su caballo de paso fino se presta para todas las disciplinas equinas, desde la monta tipo Ingles, tipo Western, hasta el salto y los eventos multiples de endurancia. La clave esta en el equipo que llegan a formar el jinete y su montura, y en las señales claras que entiende su caballo. Es facil para un caballo de paso fino ganar unos eventos de tres dias o de larga distancia, contra todas las otras razas, se ha visto con creces en America y Sur America, con todo tipo de jinetes nuevos, que no son entrenadores.

Al caballo de paso fino le gusta complacer a su montador, y responde sin hesitacion y como mejor pueda a las estimulaciones del que monta, que sea un niño, que sea una persona mayor, sin ningun problema. Se han desarrollado personas con problemas fisicos o mentales en muchos programas de terapia equina incluyendo a los caballos de paso fino. Aquellos caballos se acostumbran facilmente al manejo diferente de la rienda, a ser montados a pelo, con ayudas de la pierna, de la voz, o sin ayuda ninguna. La agilidad mental y la belleza del caracter del caballo de paso fino nos parece un regalo que hay que cuidar, asi es apenas justo que uno aprenda a montar mejor para disfrutar al maximo de la suavidad de sus andares. Este articulo no pretende dar tecnicas especificas para enseñar a montar al caballo de paso fino. Se recomiende tomar lecciones bajo el ojo de un instructor profesional, que sea en una clinica o una escuela establecida de monta del caballo de paso fino. A veces, los caballos de paso fino se encuentran en lugares tan lejanos, tan fuera de todo sitio conocedor de la raza, que no se puede encontrar ningun entrenador, ningun instructor que sepa bastante de los andares o de la monta del caballo de paso fino, porque ese mismo queda escaso en el mundo, como una raza todavia misteriosa y privilegiada. Asi que solamente daremos aqui unos puntos de referencia para los novicios, para los jinetes que vienen de otras costumbres ecuestres con muchas ayudas de pierna, que sea para dressage o para la disciplina Western. La pregunta que mas se oye es la del galope, asi que, si, claro que un jinete puede galopar con su caballo de paso fino, pero a lo mejor le cambiara a lo largo la suavidad de sus andares en las modalidades del corto y largo, asi que se debe galopar solo de vez en cuando, por precaucion. ¡Tan facilmente como puede extenderse el paso en el galope, tan facilmente se puede colectar para la pista! A los jinetes de dressage les puede parecer mas facil la monta del caballo de paso fino, solamente por la semejante manera de sentarse en ''el asiento'' y por la necesitad de colectar al caballo en perfecto grado con unas manos muy suaves. Lo unico que no debe hacer el junete de dressage es apretar mucho la pierna, no hay necesitad con el caballo de paso fino que tiene de por si un motor que siempre va adelante, sin espuela. Demasiado pierna, demasiado espuela puede transformar al caballo de paso fino en une bomba de tiempo, cuando aquel no necesita sino el sosten de la rienda y el freno para disminuir velocidad o parar del todo, y al parar, hay que recordar de soltar la rienda enseguida. Si se queda el jinete con la rienda apretada cuando el caballo ha parado, aquel ira en marcha atras, como se le ha enseñado de potro. Cuando el jinete siente por primera vez el poder del motor del paso fino bajo su asiento, esto mismo causa una emocion comparable a la de un corredor de carro de carrera, sentado en un porsche. Lo que se siente es lo que se llama el brio, el espiritu del paso fino. Puede asustar a los principiantes, pero es una gran calidad en el caballo de paso fino, no un defecto. Sin el brio, no hay motor de propulsion. No se debe enpanicar uno. No se debe preocupar. La monta de un caballo con brio se vuelve una pasion. Las manos del jinete son el freno, ¡por favor frenen con gentileza! Las piernas son el accelerador, ¡no abusen! Una vez que el jinete se acostumbra al brio y reconoce que los andares dependen de este brio, y cuando va relajandose uno con el ritmo, despues de ensayar unas cuantas paradas, la comunicacion equina empieza. Todo va bien si el caballo, claro, tiene alguna base de buen entrenamiento. Ud aprende con la practica, mas puede montar, mejor monta. Apenas se le da un besito, va corriendo el caballo, y si se siente algo suave en la silla, lo esta haciendo bien el jinete, si se siente sacudido o maltratado en la silla, lo esta haciendo mal, por causa de cualquier tropiezo en los andares. No es sino parar cuando pasa esto, reajustar su posicion, tratar otra vez las diferentes velocidades, pedirle ayuda a alguien en el suelo, si se requiere mas confianza, y aprender a conocer bien a su caballo.

Empiecen a conocer al caballo en el piso, a montarlo caminando, despacio, en un sitio encerrado y comodo, después ensayen las calles y los paseos. La pista es el ultimo gol.

Para los jinetes nuevos del caballo de paso fino queriendo ir lejos, hay cinco palabras para memorizar:

1. Paciencia
2. Relajamiento
3. Confianza (en si mismo como en el caballo)
4. Equilibrio y practica
5. Precaucion

Andrés Sánchez Alayo

martes, 21 de febrero de 2012

Historia del caballo peruano de paso

Para conocer un poco sobre la historia del famoso caballo peruano de paso nos remontamos a la época en que llegan al Perú los primeros caballos con los conquistadores españoles. A continuación la historia, disfrútenla.

El caballo llega al Perú con los conquistadores españoles, liderados por Francisco Pizarro, en el año 1532.  Este animal, totalmente desconocido para los indígenas, inspiró en ellos un profundo respeto y temor, sentimientos que resultaron decisivos para la conquista del Tahuantinsuyo.

Estos primeros ejemplares, descendientes del caballo andaluz español, serían entonces, los progenitores de los primeros caballos nacidos en tierras peruanas.

Desde entonces, el caballo peruano ha vencido los más difíciles retos geográficos, como los arenales de los desiertos de la costa, el caprichoso terreno de los valles y quebradas de la sierra y las impresionantes y gélidas alturas de la puna.

Largas e interminables rutas mediante las cuales el caballo peruano adquiere la inquebrantable resistencia de su marcha, gestándose así una raza de animales vigorosos, de gran temperamento y belleza, conocida como Caballos Peruanos de Paso.

Se constituye así una nueva raza o casta, cien por ciento peruana, que es resultado de la perseverancia y la voluntad del criador peruano. Un trabajo que tomó cerca de tres siglos de perfeccionamiento, de varias generaciones de cruces, selección y mejoramiento y que convierte al Caballo Peruano de Paso en el único en su tipo, andar y la más cómoda silla del mundo.


Andrés Sánchez Alayo

Fuente: http://www.haciendatrescanias.com.pe/caballosperuanosdepaso.html

martes, 31 de enero de 2012

José Antonio de Lavalle y García

La historia de “José Antonio”, la genial inspiración de Chabuca Granda que retrata con perfección la estampa del caballo peruano de paso, es más que una simple historia o una anécdota; encierra toda una historia de amor por algunos ignorada.

Cuando le preguntaban a Chabuca en quién se había inspirado para componer este vals con fuga de marinera, ella decía que en don José Antonio Lavalle y García, un barranquino de antaño que a manera de queja le reclamaba a Chabuca por todas las tradiciones y costumbres que se habían perdido en Lima.

Una de ellas claramente era el caballo peruano de paso, esta raza equina que era un elemento vital en las haciendas costeras del país, y que por razones ampliamente conocidas por todos se le había marginado de una sociedad que en años previos lo supo acoger con cariño y respeto.

Don José Antonio tenía un potro llamado “Pancho Fierro” que al cruzarlo con una yegua moqueguana nacieron todos los caballos ambladores que existen ahora. Era un bello animal que lo acompañaba en largas cabalgatas por su hacienda y que se convirtió en símbolo de toda una historia ligada a su propia vida.

Lavalle y García era amigo del padre de Chabuca, dice que era viejo, más viejo incluso que su padre, pero que revelaba en su personalidad a aquel hombre del campo que supo dar los mejores años de su vida a cultivar una pasión que ahora se ha convertido en nada menos que en patrimonio nacional.

Lo que más pena le daba a Chabuca, era que don José Antonio de Lavalle y García nunca pudo escuchar este tema; murió mucho antes que sonara en las radios de todo el país. Y justamente en la fuga del vals cuando dice: “Por qué me dejaste aquí”, se refiere a que don José Antonio la dejó antes de escuchar su inspiración, un vals convertido en himno del caballo peruano de paso.

Andrés Sánchez Alayo

miércoles, 25 de enero de 2012

“Padre de la Raza”

Con ese apelativo se le conoce al legendario Sol de Paiján, ilustre padrillo, padre y abuelo de campeones, ganador de múltiples campeonatos nacionales e internacionales,  muy reconocido por la afición por haber obtenido en 1982 el título de “Laureado”.

Dicho galardón solo lo obtienen aquellos ejemplares ganadores del título nacional en tres oportunidades. De esta manera, Sol de Paiján ha grabado una línea de sangre imperecedera en el tiempo a través de su vasta descendencia: Don Luis, Don Antonio y Trovador, son prueba irrefutable de ello.

Toda esta impecable trayectoria de premios y triunfos inobjetables, le permiten a este noble garañón ser considerado como el “Padre de la Raza” de los caballos peruanos de paso. Me cuentan mi padre y mis tíos que recuerdan su marcha cadenciosa, su andar elegante sobre la grama de Mamacona, aquella mañana de domingo con mucho sol y gran algarabía en las tribunas.

En esa ocasión, el aplauso y la admiración del respetable, fueron también un estímulo para la dupla jinete-caballo que dejaban lo mejor de sí en cada ejecución, en cada movimiento cimbreante y contagiante, en cada evolución de su gloriosa marcha al ansiado merecido premio.

Sin duda, para quienes lo vivieron resulta un recuerdo imborrable. Para mí, que cada vez escucho más historias como aquella, me convierte en un apasionado de estos bellos ejemplares que me llenan de orgullo y satisfacción cuando los veo realizando exhibiciones coordinadas a la perfección junto a su noble chalán.

Andrés Sánchez Alayo

martes, 17 de enero de 2012

El caballo peruano de paso en el mundo

Cada vez son más frecuentes los halagos y reconocimientos para una raza única, convertida desde hace algunos años en patrimonio nacional, y que ha logrado establecer asociaciones en muchos países donde su crianza en casi un motivo de culto.

En el Perú cada vez más se nota un interés por su crianza y desarrollo, uniendo su tradición a la marinera, la fiesta brava, el pisco y la gastronomía, todos productos de alta factura y que son apreciados en la misma dimensión que el caballo peruano de paso.

En el mundo ocurre ahora un fenómeno similar y no deja de sorprendernos que no sean necesariamente instituciones que agrupan a peruanos alrededor del mundo sino además grupos de extranjeros peruanistas, los que fomentan una cultura de aprecio y cariño hacia estos bellos ejemplares.

No deja de sorprendernos que en Suiza, Estados Unidos y Canadá, los festivales tengan un éxito inusitado congregando a un gran número de participantes y de público asistente interesado en este deporte equino convertido ahora en pasión para quien goza con su espectáculo.

Lo mismo ocurre en Argentina, Bolivia, Ecuador, Honduras y Panamá, donde la raza peruano de paso se convierte en un embajador de nuestra peruanidad, de nuestra tradición, de nuestra herencia cultural hacia el mundo.

No cabe duda que el caballo peruano de paso ha logrado acrecentar su presencia en todo el mundo. En el Perú, nos sentimos orgullosos de que esto sea así y seguiremos apoyando sus bondades y características singulares desde este blog.


Andrés Sánchez Alayo

lunes, 9 de enero de 2012

Don Manuel Mazzi, leyenda viva del caballo peruano de paso

En su criadero ubicado en el distrito de Cieneguilla, donde hace más de cincuenta años inició este intenso trajinar en el mundo de esta notable raza caballar peruana, don Manuel Mazzi, a sus resistentes 82 años, mantiene su labor diaria como si fuera un jovencito aventurero.

En la ribera del río Lurín, a lo largo de todo el fundo que alberga uno de los más reconocidos centros equinos de la capital, don Manuel aconseja a todo aquel que desea escucharlo y no deja de tener razón cuando habla con cariño de estos bellos ejemplares que lo acompañan desde hace más de medio siglo.

Mazzi se siente orgulloso de mantener viva una tradición que empezó con tan solo una yegua en su natal Chincha. Hoy cuenta con nueve generaciones de caballos peruanos de paso inscritos oficialmente en la Asociación Nacional de Propietarios y Criadores del Caballo Peruano de Paso.

Desde 1972 don Manuel es juez oficial en cuanto concurso se le convoca, tanto a nivel nacional como internacional, desde Mamacona hasta Salta o Texas. Cuenta en su haber con más de 200 concursos en los que ha participado y en los que siempre ha sabido dejar bien en alto el nombre del Perú.

Durante todos estos años, Mazzi ha cultivado la amistad de importantes hombres vinculados a la actividad. Fernando Graña y Fernando Peschiera, se cuentan entre sus principales amigos que contribuyeron a fortalecer esta pasión y con quienes compartió inolvidables experiencias.

Por todo ello, don Manuel Mazzi se convierte en una leyenda viva del caballo peruano de paso. Su contribución es valiosa y debemos resaltarla por lo que significa para el Perú este patrimonio cultural e histórico nacional. 


Andrés Sánchez Alayo